viernes, 21 de septiembre de 2007

Respetemos su memoria


No manchemos su nombre. No juguemos con sus sentimientos, con los que se llevó y con los que se quedaron sus seres queridos. No entremos en el juego de todo vale por la pasta. Respetemos su memoria, seamos tan generosos como él lo fue en vida con nosotros. No ensuciemos donde sólo debe quedar limpieza.
Alguno se preguntará a qué viene todo esto ¿verdad? Pues bien les cuento. Mi amigo Oscar Cuenca, compañero de prensa del Sevilla Fútbol Club, me informa del penoso espectáculo ofrecido por Antena 3 Televisión donde han querido meter a nuestro querido Antonio Puerta en el saco de aquellos que venden su vida por un puñado de billetes. ¿Dónde estaban estos cuando Puerta triunfaba jugando al fútbol con su Sevilla FC del alma? Pero sin disculpar a esta serie de personajes de la prensa rosa, que no conocían la bondad y generosidad de Antonio, lo que me duele aún más es que me digan que alguien de la 'casa', alguien que conocía a Puerta como Rafael Almansa se preste a este tipo de juegos. No Rafael no.
No es justo que digas las cosas que me cuentan, que especulemos con el Sevilla, que nos metamos en este circo y no sepamos dar ejemplo poniendo cordura. Teniendo dos huevos para decir: "Señores un poquito de por favor, un poquito de respeto"...
Como digo no he podido ver las imágenes, hablo por lo que me cuenta una persona de mi total confianza, de ahí que escriba estas líneas.
Seamos más valientes para otras guerras y dejemos que nuestro amigo Antonio Puerta descanse en paz. Este no es el homenaje que él merece.

PD: Amigos, en el número 9 de FOOTBALL CLUB, la Revista Oficial del club nervionense que estará disponible en la primera semana de octubre el Sevilla FC rinde un merecido homenaje a Antonio Puerta: El ángel de banda izquierda. Tomemos ejemplo y no seamos tan rastreros.

miércoles, 12 de septiembre de 2007

Lopera es... Don Manuel


Por todos es conocido que soy tan santo de la devoción de Manuel Ruiz de Lopera como él para mí. La historia se remonta a cuatro años y medio atrás cuando yo era director de Estadio Deportivo, periódico de Recoletos en Sevilla. Mi 'pecado' fue decirle al por aquel entonces presidente del Real Betis que no era rubio, ni alto... y que como humano que era cometía errores: el principal haberse dejado engañar por su técnico Víctor Fernández.
Lopera defendía lo suyo y un servidor hacía lo propio, por lo que por motivos empresariales estábamos enfrentados. Les cuento esto porque como les decía quiero que valoren estas líneas. No soy persona acostumbrada a halagar al propietario del Betis, principalmente porque no estoy de acuerdo con su gestión y por su forma de hacer las cosas. Pero no por ello, cierro los ojos ante lo obvio, ante los gestos humanos, que al menos para un servidor, están muy por encima de los deportivos. Y ahí, amigo Lopera me ha ganado usted.
Quien escribe estas líneas era amigo de Antonio José Puerta Pérez, ese 'veterano' de 22 años que se ganaba a todo el mundo por ese gran corazón del que hacía gala, precisamente el mismo corazón que nos lo arrebató. Por ello le escribo hoy don Manuel. Le escribo para decirle gracias, gracias con mayúsculas por el bello gesto que tuvo usted con motivo de la trágica muerte de mi amigo Antonio Puerta. Gracias por tragarse el orgullo, por demostrar que su Gran Poder le guía por encima de rencores, rivalidades deportivas o guerras personales con el presidente del Sevilla.
Gracias por la lección que gracias a usted le ha dado Sevilla al resto del mundo. Por una vez no hemos servido de circo para la prensa nacional demostrando ser una ciudad de Champions con un grito único de hermandad. "Antonio amigo, Sevilla está contigo".
Le pido igualmente que haga extensiva esta gratitud a su afición, esa afición impresionante que nos aplaudía a cada uno de los que pasabamos a dar el último adiós a Antonio. A esos aficionados béticos que con sus camisetas verdiblancas vi llorar cuando salía, del hospital Virgen del Rocío, con mi esposa y Jesús Rodríguez de Moya, representante de Puerta.
Gracias por dejar de ser Lopera y convertirse en Don Manuel. Gracias por ese abrazo sincero con Del Nido, el abrazo que yo denomino como 'El milagro de Puerta'. Gracias a detalles como el suyo, hemos conseguido agrandar la figura de Puerta. Se fue el futbolista pero nació el mito.
Le ví durante su visita al sepelio de Puerta encabezando la expedición bética, pero pensé que no era el momento de decirle todo esto que le transmito ahora a través de estas líneas. No quería que algunos oportunistas quisieran buscar un nuevo enfrentamiento entre usted y yo; pero he de reconocer que me emocionó su gesto y que me habría gustado darle personalmente las gracias.
Usted fue el Lopera que quiero, el que necesita el Betis, el fútbol... el otro ya sabe que no me gusta. Admiro a este Lopera, al de los pequeños detalles que al fin y al cabo son los que hacen a las grandes personas. Usted ha dado una auténtica lección de humanidad, de saber estar, de señorío, caballerosidad... un gesto a la altura de una entidad de la historia del Real Betis Balompié.
Y por ello se lo transmito a través de mi página web www.politicamenteincorrecto.es. Confío que mi amigo, y consejero bético, José Manuel Villarán le haga llegar estas líneas y ojalá pueda agradecerle muy pronto todo lo que usted y la afición del Real Betis Balompié han hecho estos días por un gran futbolista, y una gran persona: Antonio José Puerta Pérez.
Gracias por demostrar que Lopera es... Don Manuel.

José Miguel Muñoz

PD: Podría haber escrito esto cualquier día pero he preferido hacerlo hoy 12 d Septiembre en el 100 cumpleaños del Betis, en su Centenario. Felicidades al Real Betis Balompié y a todos los béticos.

lunes, 3 de septiembre de 2007

¡Como te echo de menos!


Querido Antonio:
Hace poco más de quince meses, tu gol ante el Schalke 04 en las semifinales de la Copa de la UEFA nos cambió la vida, y ahora, tu precipitado adiós nos parte el alma en dos y nos deja un vacío que será imposible volver a llenar. Ya no estarás tú para animarnos el día, para provocar nuestra atención cuando nuestra mente está en cien mil problemas; problemas que ahora, con tu marcha, entendemos que son simplemente … insignificantes.
Te has ido como lo hacen los grandes toreros, en el ruedo, tu plaza particular, ese Ramón Sánchez Pizjuán que tanto disfrutó con tu juego, con ese arte hecho fútbol, con esa forma tan especial que tenías de tratar el balón.
Amigo, nos has dado una nueva lección. Te has ido en tu mejor momento, a lo campeón, con un palmares envidiable, probando las mieles de la internacionalidad, ganándolo todo, a lo grande. Con una madurez impropia de un joven de apenas 22 años, enseñándole a todo el mundo futbolístico que se puede ser grande y a la vez humilde. Haciendo que todos quisiéramos ser Antonio Puerta.
Muchos pensaran que la vida te ha ganado este partido. Se equivocan. Has ganado todas las finales que has disputado como sevillista y en este caso también has salido vencedor porque la herencia que nos dejas nos enseñará a ser mejores personas.
Gracias por todo lo que nos dejas, gracias por existir; gracias por esa sonrisa que siempre dibujaban tus labios y que tantas sonrisas arrancaron de los nuestros.
Nos dejas rotos pero felices por tu recuerdo, ese que siempre te mantendrá vivo junto a nosotros. Han sido unos días muy difíciles para la familia sevillista, que han estado tan pendientes de tu evolución en el hospital como antes lo hicieron en el terreno de juego.
Se va la chispa de la casa, de esa familia Puerta que tan pendientes estaban de ti. Se va el amor de su vida de tu mujer, se va el padre de ese bebé que está a punto de ver la luz.
Se nos van tantas cosas con tu marcha…
Hasta siempre Antonio. ¡Cómo te echo de menos!

(Fotografía gentileza de: JUAN FLORES)