jueves, 14 de junio de 2007

La cagada de Buenafuente



Los índices de audiencia han dejado claro que la fórmula de Andreu Buenafuente funciona. Puede gustar más o menos pero ahí están sus números. Lo que está menos claro es el nivel de conocimiento futbolístico de su costoso equipo de producción. Algunos pensarán que un servidor le saca punta a todo pero seguro que los aficionados sevillistas entenderán al cien por cien ese encabezado de 'la cagada de Buenafuente'. Y es que el showman catalán no ha estado muy fino, y no lo digo precisamente porque haya contado con el técnico del Sevilla FC como invitado en su programa de esta noche, no; o por haber contado con el también sevillista Andrés Palop hace unos meses ¡que nooooo!
La cagada de Buenafuente no es otra que la de colocar en los créditos que aparecen debajo del nombre del invitado, es decir, tras Juande Ramos... entrenador del Sevilla C. F. Sí, Club de Fútbol como lo oyen, o mejor dicho, como lo leen. ¿Dónde está el conocimiento futbolístico del equipo de producción de Antena 3 Televisión? ¿No le hierve la sangre a nadie de la redacción de deportes que ve el programa para llamar a su 'casa' y subsanar el error? Tan fácil como llamar y decir: "Señores el nombre correcto del Sevilla es Fútbol Club y no Club de Fútbol.
¿Tan fuerte es la madriditis de esa casa o su antisevillismo para tan lamentable error? Porque las cuentas pendientes de Antena 3 TV con la Entidad de Nervión y sus litigios por el incumplimiento de contrato del canal de televisión son conocidos por todos.
Buenafuente, menos monólogos y un repaso al Extra Liga de Don Balón...

domingo, 10 de junio de 2007

El forofo Ramón Calderón


Real Madrid, FC Barcelona y Sevilla FC pelean por la Liga. Es la noche del sábado 9 de junio de 2007. Los blancos pierden 2-1 en La Romareda ante el Real Zaragoza, el Barça gana por idéntico resultado en el Cam Nou ante el Espanyol mientras que los sevillistas empatan a cero en el Ono Estadi de Mallorca.
Estos resultados dejan al Barcelona más cerca del título de Liga arrebatándoselo a un Madrid que ya se veía campeón, pero en apenas 18 segundos cambia la historia; esa es la grandeza del fútbol. Van Nistelrooy empata en tierras mañas mientras que instantes después el espanyolista Tamudo les quita la soga del cuello, a los blancos, al poner la igualada en el derbi catalán. Tras el pitido final, la fiesta se desborda en el terreno de juego de La Romareda, hasta tal punto, que los jugadores se abrazan como si el título de Liga fuera ya suyo.
Pero por si esto fuera poco, se vive una imagen impropia de un presidente de un club de fútbol que aún no ha ganado absolutamente nada. El máximo mandatario del Real Madrid se lanza al césped de La Romareda para darse un baño de multitudes en un afán de protagonismo impropio de alguien que ostenta su cargo porque al fin y al cabo ¿había ganado el Madrid la Liga con ese empate en La Romareda? No, todo queda abierto a lo que ocurra en la última jornada con los tres mismos candidatos en el candelero (R. Madrid, Barcelona y Sevilla) y los mismos porcentajes a falta de una jornada para la conclusión.
Calderón se dejó llevar por su forofismo, por la alegría de soltar ese miedo que había tenido metido en el cuerpo durante toda la noche maña, por ese nudo que tanto le apretaba la garganta durante el partido; nudo que no era precisamente el de la corbata.
La afición madridista se contagiaba de la alegría del presidente y se marchaba a La Cibeles como si el título de Liga ya fuera suyo después de varios años de sequía, pero... ¿qué ocurrirá si el próximo domingo Barcelona o Sevilla son los triunfadores de una jornada que se presenta tan apasionante como ésta pasada? Nada, porque a los galácticos se les permite todo. Hoy, un día después nadie ha hecho mención de la lamentable actuación del presidente blanco al festejar el empate de La Romareda como si éste le hubiera dado la Liga.
Ingenuamente me pregunto ¿qué habría pasado si los que se lanzaran al césped a celebrar un posible título de Liga hubieran sido los presidentes de FC Barcelona o Sevilla FC?
Se lo digo yo, otro gallo habría cantado.

Presentación


Queridos amigos:
En primer lugar agradeceros vuestro paso por esta página que nace con el fin de poder expresar mis opiniones, en la mayoría de los casos, políticamente incorrectas. Esta página será por tanto una tribuna de opinión donde intentar recuperar (en la media de lo posible) esa libertad de expresión que un 17 de mayo quisieron arrebatarme por defender mi filosofía de vida, que no es otra que ser claro, decir lo que pienso, y demostrar que es mejor vivir un día de pie que cien de rodillas.
Espero que los que decidan darse un paseo por este rinconcito se expresen con el mismo respeto que lo hace un servidor, aunque en muchos casos, no compartan mis opiniones que repito son eso, las opiniones de un loco soñador que huye de un peloteo y falsería tan de moda en este mundo del periodismo en particular, y la vida en general.
A mis amigos, gracias por su confianza, por no darme la espalda cuando caí de lo más alto, por confiar ciegamente en que volvería a estar arriba. A mi familia gracias por ayudarme a ser mejor persona. Y a mi mujer gracias por enseñarme que el mundo es más bello viéndolo con sus ojos.
Y tampoco me olvido de vosotros, esos cobardes que sólo actúan en manada; esos que se consideran mis enemigos, aquellos que en el camino demostraron no ser mis amigos... A vosotros también gracias, gracias de corazón por vuestras puñaladas y vuestras traiciones porque ellas me hicieron más fuerte. Y no olvideis que si llamáis a mi puerta aquí me tendréis. Como siempre... políticamente incorrecto.