Aitor Puerta, ha nacido otro campeon

Era un domingo de resaca, el Sevilla FC había jugado en la jornada sabatina por su compromiso de Champions, y Aitor Puerta Roldán se apresuraba para llegar al mundo e intentar llenar, en la medida de sus posibilidades, el tremendo hueco dejado hace poco menos de dos meses por su padre, el recordado Antonio Puerta.
Con 3, 7 kilos llegaba al mundo el futuro dorsal 16 del equipo sevillista, entidad que se ha encargado de darle rápidamente, como habría hecho su padre, su 'bautismo futbolístico' al inscribirle como socio del Sevilla FC nada más saber de su nacimiento. Aunque se había especulado tras la muerte de Puerta que su hijo llevaría el nombre de su padre, finalmente no ha sido así ya que Mar, su orgullosa madre, ha optado por llamarle Aitor, el nombre elegido en su día por ella y su añorado Antonio.
A partir de ahora, y a medida que vaya cumpliendo años, Aitor Puerta Roldán, que así se llama el hijo de Antonio Puerta y Mar, tendrá que irse acostumbrando a escuchar la historia de su padre, el hombre que nos cambió la vida con aquel inolvidable, no tanto como él, gol al Schalke 04 en el partido de vuelta de la semifinal de la Copa de la UEFA. Pero al igual que su padre cambió la vida del sevillismo, él cambiará ahora la de su familia, la de su madre, sus abuelos, sus hermanas, sus tíos... aquellos que recogerán el mejor legado posible que, junto a su gran humanidad, nos pudo dejar nuestro querido Antonio Puerta.
Con su fallecimiento se fue el futbolista, nació la leyenda. Y ahora llega su legado: Aitor Antonio Puerta Roldán, otro campeón.